|
De momento nos han ido estrangulando la economía no pagando lo que deben, aportando el dinero que nos transfieren (¡a crédito! ) siempre justo el último día del vencimiento (y en algunos casos más allá) por ejemplo para pagar nóminas, con el propósito de recordar quién manda y de quién es el techo de la casa donde está la caja fuerte. Ahora suman al estrangulamiento fiscal el menosprecio institucional explícito y un tratar de poner en evidencia vía protocolo lo que Catalunya es hoy por hoy respecto de España a nivel protocolario: una realidad menor. Ayer a cuento del acto de Foment, ahora a cuento del Foro del Mediterráneo, mañana ya se inventarán otra. Pam-pam al díscolo de Artur Mas y su partido, eso sí, en el culo de todos los catalanes y de unas instituciones que en teoría son de todos, también de unos señores del PP que proyectan valorarlas muy poco y respetarlas bastante menos. El lunes el diputado José Antonio Coto lo decía claro en televisión, contraponiendo la cruda realidad a la versión oficial del ministro Manuel García Margallo: “¡No queremos que el señor Mas hable en el acto de Pedralbes porque es separatista!”. Claro y diáfano. Por rebelde sin causa. Pam-pam. Y Siberia en el horizonte, si no nos emancipamos lo antes posible de esta especie de Familia Monster que nos ha tocado en gracia.
|