|
Aquel proyecto, bautizado como Imaginative Colours, quiso mostrar el potencial de comunicación de 22 tipos diferentes de papel. Lo hizo desde una perspectiva novedosa, integral. Por un lado, exploró las posibilidades expresivas y comunicativas de cada papel, puesto en relación con productos concretos. Por otro, aportó una valiosa información práctica a diseñadores e imprentas. Imaginative Colours se nos muestra hoy como una herramienta útil a partir de una preciosa colección de etiquetas. En ellas hay riesgo, creatividad y un sentido lúdico. La idea de juego se ve reforzada al saber que los 22 productos son ficticios. Fue la primera vez que un muestrario de papeles se planteaba en estos términos.
|