|
«Este libro es ante todo para hojear una y otra vez... Lo mejor es hojear, volverse, hojear, deleitarse. Un libro que jamás pasará inadvertido, no sólo por su descomunal tamaño (ni piense en poder mirarlo recostado en su cama) sino también por su sobresaliente contenido.»— Semana, Bogotá, Colombia
|
|
"Este libro es ante todo para hojear una y otra vez. (…) Lo mejor es hojear, volverse, hojear, deleitarse. Un libro que jamás pasará inadvertido, no sólo por su descomunal tamaño (ni piense en poder mirarlo recostado en su cama) sino también por su sobresaliente contenido."— Semana, Bogotá, Colombie
|
|
"Este libro es ante todo para hojear una y otra vez. (…) Lo mejor es hojear, volverse, hojear, deleitarse. Un libro que jamás pasará inadvertido, no sólo por su descomunal tamaño (ni piense en poder mirarlo recostado en su cama) sino también por su sobresaliente contenido."— Semana, Bogotá, Kolumbien
|