|
|
De aquellos primeros tiempos de radio en Ibiza hablan con verdadera pasión no exenta de nostalgia: “Era súper divertido y muy estresante también porque no había tecnología, era todo manual.” Nos cuentan cómo tenían que, literalmente, cortar y empalmar las cintas, cómo se hacían todos los programas en directo y la gran revolución que supuso en su día el spotmaster, que rebobinaba los cartuchos. Cuando se multiplicaba el volumen de publicidad en Navidades, como no les daba tiempo de rebobinar las cintas, recitaban de memoria los textos de los anunciantes para ganar unos segundos y poder cambiar los discos. Otro gran cambio fue el micrófono inalámbrico que les permitía moverse, aunque al principio la gente, que no estaba acostumbraba, les advertía constantemente: “¡Oiga, que se le ha desenchufado el micro!”.
|